Pulsera de obsidiana negra y lapislázuli, bola de 8 mm, elástica. Dos minerales cuyas propiedades se complementan haciendo de ésta una pulsera muy especial, además de ser exteriormente muy atractiva.
Pulsera de obsidiana negra y lapislázuli, en bola de 8 mm. Una combinación muy especial tanto a nivel externo como interno.
Por una parte, la obsidiana negra es una piedra que nos ayuda a observar desde el exterior nuestros traumas, puntos débiles e inseguridades, ayudándonos a desbloquearlos. Es una piedra protectora que absorbe las negatividades.
El lapislázuli es una piedra protectora, armonizadora y clarividente. Actúa sobre el chakra de la garganta. A nivel externo es muy apreciada por su color azul intenso en el que se puede observar el brillo de la pirita que forma parte de su composición.